Misa de Requiem + María Verónica Wolff Paz

Canto de entrada


Acto de contrición

Yo confieso ante Dios Todopoderoso, y ante ustedes hermanos que he pecado mucho de pensamiento, palabra, obra y omisión. Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa.
Por eso ruego a Santa María siempre Virgen, a los ángeles, a los santos y a ustedes hermanos, que intercedan por mí ante Dios, Nuestro Señor.

Dios todopoderoso tenga misericordia de nosotros, perdone nuestros pecados y no lleve a la vida eterna. Amen.


Señor, ten piedad


Oración colecta

Suba nuestra oración a tu presencia, Señor,
y que las alegrías eternas acojan
a nuestra hermana Verónica,
tú que la creaste a tu imagen
y la hiciste tu hija de adopción en el bautismo,
concédele ahora entrar en posesión
de la herencia prometida.
Por nuestro Señor Jesucristo.

Amen.


Lectura (1 Jn 3, 1-2)

Queridos hijos: Miren cuánto amor nos ha tenido el Padre, pues no sólo nos llamamos hijos de Dios, sino que lo somos. Si el mundo no nos reconoce, es porque tampoco lo ha reconocido a él.

Hermanos míos, ahora somos hijos de Dios, pero aún no se ha manifestado cómo seremos al fin. Y ya sabemos que, cuando él se manifieste, vamos a ser semejantes a él, porque lo veremos tal cual es.

Palabra del Señor. Te alabamos, Señor.


Aleluya

Yo soy el buen pastor, dice el Señor; yo conozco a mis ovejas y ellas me conocen a mí.


Evangelio (Jn 10, 11-18)

En aquel tiempo, Jesús dijo a los fariseos: “Yo soy el buen pastor. El buen pastor da la vida por sus ovejas. En cambio, el asalariado, el que no es el pastor ni el dueño de las ovejas, cuando ve venir al lobo, abandona las ovejas y huye; el lobo se arroja sobre ellas y las dispersa, porque a un asalariado no le importan las ovejas.

Yo soy el buen pastor, porque conozco a mis ovejas y ellas me conocen a mí, así como el Padre me conoce a mí y yo conozco al Padre. Yo doy la vida por mis ovejas. Tengo además otras ovejas que no son de este redil y es necesario que las traiga también a ellas; escucharán mi voz y habrá un solo rebaño y un solo pastor.

El Padre me ama porque doy mi vida para volverla a tomar. Nadie me la quita; yo la doy porque quiero. Tengo poder para darla y lo tengo también para volverla a tomar. Éste es el mandato que he recibido de mi Padre’’.


Credo

Creo en Dios, Padre Todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra.

Creo en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor,
que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo,
nació de Santa María Virgen,
padeció bajo el poder de Poncio Pilato
fue crucificado, muerto y sepultado,
descendió a los infiernos,
al tercer día resucitó de entre los muertos,
subió a los cielos
y está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso.
Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos.

Creo en el Espíritu Santo,
la santa Iglesia católica,
la comunión de los santos,
el perdón de los pecados,
la resurrección de la carne
y la vida eterna.
Amén.


Oración de los fieles

Zu Gott, dem allmächtigen Vater, der seinen Sohn Jesus Christus von den Toten auferweckt hat, lasst uns vertrauensvoll beten für das Heil der Lebenden und der Verstorbenen.

1. Für unsere verstorbene Schwester Veronica, die einst in der Taufe das Samenkorn des ewigen Lebens empfangen hat, bitten wir den Herrn, dass er ihr die ewige Gemeinschaft der Heiligen schenke.

Allmächtiger Gott, demütig rufen wir zu dir: Wir bitten dich, erhöre uns.

2. Para que Verónica, que en el bautismo recibió el germen de la vida eterna y en la Eucaristía se alimentó con Cristo, pan de vida, resucite con él en el último día.

Allmächtiger Gott, demütig rufen wir zu dir: Wir bitten dich, erhöre uns.

3. Für die Seelen unserer verstorbenen Brüder und Schwestern, unserer Verwandten, Freunde und Wohltäter, bitten wir den Herrn, dass er ihnen den Lohn für ihre Mühen zuteile.

Allmächtiger Gott, demütig rufen wir zu dir: Wir bitten dich, erhöre uns.

4. Para que los familiares y amigos de Verónica encuentren el consuelo y la esperanza que nos da el Evangelio de Jesús.

Allmächtiger Gott, demütig rufen wir zu dir: Wir bitten dich, erhöre uns.

Wir bitten dich, Herr, unser Gebet komme den Seelen deiner Dienerinnen und Diener zugute. Befreie sie von allen Sünden und gib ihnen Anteil an deiner Erlösung durch Christus, unseren Herrn.


Ofertorio


Oración sobre las ofrendas

Señor, este oblación, que nosotros te presentamos confiados,
recíbela tú complacido,
y por este sacrificio,
que quisiste fuera el mejor remedio
para todos los hombres,
concede a nuestra hermana Verónica la salvación eterna.
Por Jesucristo nuestro Señor.


Prefacio

El Seńor esté con ustedes. 
Y con tu espíritu. 
Levantemos el corazón. 
Lo tenemos levantado hacia el Seńor.
Demos gracias al Seńor nuestro Dios. 
Es justo y necesario.

En verdad es justo y necesario,
es nuestro deber y salvación
darte gracias
siempre y en todo lugar,
Señor, Padre santo,
Dios todopoderoso y eterno,
por Cristo, Señor nuestro.

En él brilla la esperanza
de nuestra feliz resurrección;
y así, aunque la certeza de morir nos entristece,
nos consuela la promesa
de la futura inmortalidad.
Porque la vida de los que en ti creemos, Señor,
no termina, se transforma;
y, al deshacerse nuestra morada terrenal,
adquirimos una mansión eterna en el cielo.

Por eso, con los ángeles y arcángeles
y con todos los coros celestiales,
cantamos sin cesar el himno de tu gloria:


Santo


Plegaria Eucaristica

Santo eres en verdad, Señor, fuente de toda santidad; por eso te pedimos que santifiques estos dones con la efusión de tu, Espíritu, de manera que se conviertan para nosotros en Cuerpo y Sangre de Jesucristo, nuestro Señor. El cual, cuando iba a ser entregado a su Pasión, voluntariamente aceptada, tomó pan, dándote gracias lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo:

TOMEN Y COMAN TODOS DE ÉL, PORQUE ESTO ES MI CUERPO, QUE SERÁ ENTREGADO POR USTEDES.

Del mismo modo, acabada la cena, tomó el cáliz, y, dándote gracias de nuevo, lo pasó a sus discípulos, diciendo:

TOMEN Y BEBAN TODOS DE ÉL, PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE, SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA, QUE SERÁ DERRAMADA POR USTEDES Y POR MUCHOS PARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS. HAGAN ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.

Éste es el sacramento de nuestra fe.

Anunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección. ¡Ven, Señor Jesús!

Así pues, Padre, al celebrar ahora el memorial de la muerte y resurrección de tu Hijo, te ofrecemos el pan de vida y el cáliz de salvación, y te damos gracias porque nos haces dignos de servirte en tu presencia.

Te pedimos humildemente que el Espíritu Santo congregue en la unidad a cuantos participamos del Cuerpo y Sangre de Cristo.

Acuérdate, Señor, de tu Iglesia extendida por toda la tierra; y con el Papa Francisco, con nuestro Obispo Carlos, y todos los pastores que cuidan de tu pueblo, llévala a su perfección por la caridad.

Acuérdate también de nuestros hermanos que durmieron en la esperanza de la resurrección, y de todos los que han muerto en tu misericordia; admítelos a contemplar la luz de tu rostro.

Ten misericordia de todos nosotros, y así, con María, la Virgen Madre de Dios, su esposo san José, los apóstoles y cuantos vivieron en tu amistad a través de los tiempos, merezcamos, por tu Hijo Jesucristo, compartir la vida eterna y cantar tus alabanzas.

Por Cristo, con Él y en Él, a ti, Dios Padre omnipotente, en la unidad del Espíritu Santo, todo honor y toda gloria por los siglos de los siglos. Amén.


Padre nuestro

Fieles a la recomendación del Salvador y siguiendo su divina enseñanza, nos atrevemos a decir:

Padre nuestro que estás en el cielo santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal.

Líbranos de todos los males, Señor y concédenos la paz en nuestros días, para que ayudados por tu misericordia, vivamos siempre libres de pecado y protegidos de toda perturbación, mientras esperamos la gloriosa venida de nuestro Salvador Jesucristo.

Tuyo es el reino, tuyo el poder y la gloria, por siempre, Señor.


Rito de la Paz

Señor Jesucristo, que dijiste a tus apóstoles: ‚La paz les dejo, mi paz les doy‘, no tengas en cuenta nuestros pecados, sino la fe de tu Iglesia y, conforme a tu palabra, concédele la paz y la unidad. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.

La paz del Señor esté siempre con ustedes.

Y con tu espíritu.


Cordero de Dios

Este es el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo. Dichosos los invitados a la cena del Señor.

Señor, no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme.


Antífona de la Comunión

Ha resucitado el buen Pastor que dio la vida por sus ovejas y se dignó morir por su grey. Aleluya.


Acción de gracias


Oración después de la Comunión

Renovados por este alimento sagrado,
te pedimos, Señor, que nuestra hermana Verónica
libre de las ataduras de la muerte,
viva ya la alegría de participar
en la resurrección de Cristo.
Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.

Amén.


Último adios

Am Freitag, dem 16. April ist María Verónica Wolff Paz gestorben. Wir haben Abschied nehmen müssen und bleiben ihr doch verbunden. Im Gedenken an sie haben wir uns jetzt versammelt, um die Urne mit ihrer Asche beizusetzen. Wir freuen uns, dass Herr Bernd Ulrich von unserer evangelischen Schwestergemeinde Heilig Geist gekommen ist, um ehrende Worte der Erinnerung an die Verstorbene an uns zu richten. Auch der Kirchenvorstand unserer Gemeinde möchte sich von seinem Mitglied verabschieden.

Ansprache Herr Bernd Ulrich (evangelische Gemeinde)
Ansprache Herr Ludwig Johannsen (Kirchenvorstand)

Despedida

Lasset uns beten.
Herr Jesus Christus, wie ein guter Hirt sorgst du für uns. Auch wenn es um uns dunkel wird, lässt du uns nicht allein. Wir bitten dich: Führe unsere Schwester Verónica in das Licht des Lebens und lass sie bei dir zu Hause sein in Ewigkeit. Amen.

Im Vertrauen auf die Gegenwart Christi rufen wir zu ihm:
Herr Jesus Christus, du bist für uns gestorben. Herr, erbarme dich unser.

Herr, erbarme dich unser.

Du bist vom Tode auferstanden. Christus, erbarme dich unser.

Christus, erbarme dich unser.

Du bist uns vorausgegangen zum Vater. Herr, erbarme dich unser.

Herr, erbarme dich unser.

Kommt zu Hilfe, ihr Heiligen Gottes, eilt herbei, ihr Engel des Herrn: Nehmt ihre Seele auf;
tragt sie vor das Angesicht des Allerhöchsten. Es empfange dich Christus, der dich berufen hat;
und die Engel mögen dich geleiten in Abrahams Schoß. Nehmt seine ihre Seele auf; tragt sie vor das Angesicht des Allerhöchsten. Herr, gib ihr die ewige Ruhe: Und das ewige Licht leuchte ihr. Tragt sie vor das Angesicht des Allerhöchsten.

Invocaciones

Zu unserem Herrn Jesus Christus beten wir voll Vertrauen für Veronica.
Erlöse sie, o Herr!
Von aller Schuld
Erlöse sie, o Herr!
Durch deine Menschwerdung und dein heiliges Leben
Erlöse sie, o Herr!
Durch dein Kreuz und Leiden
Erlöse sie, o Herr!
Durch dein Sterben und Auferstehen
Erlöse sie, o Herr!
Durch deine Wiederkunft in Herrlichkeit
Erlöse sie, o Herr!

In deine Hände, gütiger Vater, befehlen wir die Seele unserer Schwester Veronica, gestützt auf die sichere Hoffnung, dass sie wie alle, die in Christus gestorben sind, mit Christus auferstehen wird am Jüngsten Tag.

Wir danken dir für alle Wohltaten, mit denen du deine Dienerin in diesem sterblichen Leben so reich beschenkt hast, dass sie uns zu Zeichen deiner Güte und der seligen Gemeinschaft der Heiligen in Christus geworden sind.

Die Ohren deiner Barmherzigkeit mögen daher für unsere Bitten offenstehen, Herr, damit sich deiner Dienerin die Pforten des Paradieses auftun. Uns aber, die wir zurückbleiben, gib die Kraft, einander zu trösten mit der Botschaft des Glaubens bis wir alle vereint sind in Christus und so auch mit unserer Schwester allezeit bei dir sein können. Durch Christus, unseren Herrn. Amen.

Aspersión del agua bendita

In der Taufe bist du mit Christus begraben worden und hast in ihm neues Leben empfangen. Der Herr vollende an dir, was er in der Taufe begonnen hat.

Señal de la Santa Cruz

Im Kreuz unseres Herrn Jesus Christus ist Auferstehung und Heil. Der Herr schenke dir seinen Frieden.

In paradisum

Al paraíso te lleven los ángeles, a tu llegada te reciban los mártires y te introduzcan en la ciudad santa de Jerusalén. El coro de los ángeles te reciba, y junto con Lázaro, pobre en esta vida, tengas descanso eterno.

Bendición final

Junto al cuerpo, ahora sin vida, de nuestra hermana, está encendida, oh Cristo Jesús, esta llama, símbolo de tu cuerpo glorioso y resucitado; que el resplandor de este cirio pascual ilumine nuestras tinieblas y alumbre nuestro camino de esperanza, hasta que lleguemos a ti, oh claridad eterna, que vives y reinas, inmortal y glorioso, por los siglos de los siglos. Amén.

El Señor esté con ustedes.

Y con tu espíritu.

La bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo descienda sobre ustedes y permanezca para siempre. Amen.

Pueden ir en paz. Demos gracias a Dios.

Dale Señor el descanso eterno. Y luzca para ella la luz perpetua.
Que descanse en paz. Así sea.

Procesión a las criptas

Bendición del nicho

Lasset uns beten.
Herr Jesus Christus, du hast drei Tage im Grab geruht und die Gräber aller, die an dich glauben, so geheiligt, dass sie als Ruhestätte für unsere Toten auch die Hoffnung auf die Auferstehung vermehren. Gewähre gnädig, dass in diesem Grab deine Dienerin in Frieden ruhe, bis du sie auferweckst und erleuchtest, denn du bist die Auferstehung und das Leben.

Im Licht deines Angesichtes lass sie im Himmel das ewige Licht schauen, der du lebst und herrschst in alle Ewigkeit.

Depósito de la urna

Padre nuestro